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domingo, 29 de marzo de 2015
Ficha Técnica
Título Original: Le Meraviglie del Duemila
Nº de
páginas: 140
págs.
Editorial: Createspace
Lengua: Español
ISBN: 978-1508403135
Año edición: 2015
En 1907 las librerías italianas ofrecían un nuevo libro, Le Meraviglie del
Duemila(Las Maravillas del año, en la edición española de 1910), novela de
ciencia ficción firmada por un autor prolífico: Emilio Salgari. Por aquel
entonces el narrador de Verona ya tenía escritas sus más recordadas novelas,
verdaderos clásicos como Il Re Della Prateria (1896),Il Corsaro Nero (1898), Li
Tigri di Mompracem (1900), La Montagna Di Luce (1902) o Capitan Tempesta (1905).
Autor
Emilio Salgari nació en Verona, Italia, el 21 de agosto de 1862, y
falleció en Turín, Italia, el 25 de abril de 1911. Hijo de una familia de
comerciantes, de joven sirvió a bordo de un barco que recorrió la costa
Adriática y Mediterránea, pero no hay pruebas de que hiciera más viajes por
mar, aunque aseguraba que los lugares exóticos que aparecían en sus libros se
basaban en sitios que había visitado personalmente. Comenzó a prepararse en el
Real Instituto Técnico Naval P. Sarpi de Venecia, pero no llegó a obtener el
título de capitán que ansiaba. Sus novelas, llenas de acción, fueron muchas,
pero probablemente sea conocido sobre todo por crear el personaje de Sandokán.
A pesar de su éxito, vivió en una relativa miseria que, junto con el
desequilibio mental de su esposa, la actriz de teatro Ida Peruzzi, con quien
tuvo cuatro hijos, lo condujo a suicidarse en 1911 realizando el rito
tradicional del Hara-kiri. Escribió en total ochenta y cuatro novelas e
incontables relatos.Opinión Personal
Si el autor busca viajar al futuro, lo mejor de la novela es volver al día de antes de leerla.
Creo que muchos de los lectores con muchos
años de lecturas a sus espaldas sus inicios lectores fueron acompañados de
lecturas como los cinco, o Sandokan, esas eran las lecturas juveniles que nos
acompañaban y hoy viene al blog un libro de Emilio Salgari. Quizás uno de los
escritores más prolíficos que han existido.
Al hilo de la cantidad de libros que un
autor es capaz de concebir y de que le sean publicados no da la razón para que
sea mejor o peor escritor, sino que ha podido tener mucha más suerte con sus
editores. Emilio Salgari fue capaz de publicar en un periodo relativamente
corto una gran cantidad de novelas y relatos. A la posteridad este autor llega
por una serie de novelas a las que actualmente catalogaríamos como juveniles,
en su época simplemente serían de aventuras. El ser el creador de tantísimas historias
hace que su legado literario sea un cumulo de altibajos.
El querer escribir tantas historias hace
que la preparación de los libros y el desarrollo de la historia en muchos de
ellos sea algo anecdótico, simplemente es la sucesión y desarrollo menos que
más desarrollada e hilvanada. Eso es simplemente lo que le sucede a la novela
que hoy estamos tratando.
La historia que genera la novela, el poder estar
presente en el futuro ya sea de una manera o de otra en este caso el poder a través
del desarrollo científico de ser capaz de alargar o mejor dicho alterar el
transcurso vital normal, y poder asistir a lo que puede deparar a la nuestra
civilización en el futuro.
Como historia y novela esto es simplemente
lo que contiene este libro, a lo que debemos agradecer al autor el que fuera
muy intenso en su historia y lo dejara en pocas páginas. Lo cual agradece
enormemente el lector que por casualidad llega actualmente hasta este libro o
llegara en su momento.
Desde el instante que el libro deja el
punto donde los protagonistas entran en el sueño del que despertaran 100 años después,
la novela se acaba, se convierte en un mero transcurrir de líneas donde el
autor deja constancia de cómo piensa que los avances científicos como la
electricidad, los motores, aviones, etc. Que ha conocido en su época van a ir desarrollándose,
pero abandona totalmente lo que debe contener un libro, una novela, un hilo
argumental, una historia que interese al lector.
Un libro aparte de ser escrito para
satisfacción del autor, pero debe satisfacerle desde su yo lector para que
tenga la pequeña posibilidad de llegar hasta los posibles lectores. No como un
concurso de quien es el que más escribe, de quien es capaz de publicar un mayor
número de libros importando poco la calidad literaria, bueno ni calidad
literaria, sino sin importar ni el necesario entretenimiento para el lector,
eso es lo que parece esta novela una simple mancha en las páginas blancas para
que se pudiera publicar.
Quizás el juzgar una novela con más de 100
años de perspectiva hace que los gustos literarios no sean los mismos, pero esa
misma razón haría que pudiéramos odiar o incluso defenestrar novelas que son
consideradas como iconos de la literatura, lo que demuestra que no es la antigüedad
ni el estilo en el que se ha escrito la novela sino el cómo y por qué se ha
escrito.
La novela es una sucesión sin sentido de
inventos que vienen a la cabeza del autor sin ton ni son, no busca que la
historia sea coherente sino simplemente introducir lo que para él va a ser el
futuro y el desarrollo científico. La novela va transcurriendo como un
verdadero aburrimiento simplemente con el anhelo de que cada vez quedan menos
páginas para finalizar y esperando siempre algo que haga que valga la pena
haberse leído la novela, pero por desgracia ni eso consigue.
Los personajes son simples, sin ningún
desarrollo, no tienen nada que ofrecer sino solamente servir como nexo para
poder ir desarrollando la mal llamada historia, y poder recorrer junto a ellos
lugares en los que falta de todo, no tenemos una sola descripción interesante
que sirva para que nos podamos situar.
En general una novela floja que la verdad
no deja en muy buen lugar al autor ni creo que realmente le llenara.
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1 comentarios:
No estoy nada de acuerdo.
Para gustos colores.
Hay que leerla en italiano original. Además es una novela corta. Invita a desarrolarla, un ejemplo : adaptarla al cine y ampliar lo que adolece según tú.
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